Pasó poco más de una hora o eso es lo que creo, el caso es que cuando
desperté quedaban muy pocas personas en el sitio e increíblemente habían sido remplazadas por pavos salvajes, pizotes y algunas aves que se dejaban ver ya que
los humanos habían empezado a alejarse. Me levanté por supuesto bastante
desorientada, me disculpé con los Mayas por si les había irrespetado pero les di
las gracias porque no sé cuantas personas pueden contar la misma historia.
Nuevamente cámara colgando del cuello,mochila al hombro y a caminar. Me dirigí a La Acrópolis Norte, aproveché un momento en que se quedó
prácticamente sola y me dispuse a caminar, subía y bajaba escalones, me perdía
entre las enormes paredes y trataba de llegar a los rincones más ocultos, pero
amigos después de unos minutos las energías empiezan a sentirse, el corazón se
acelera y la respiración se corta. No puedo explicarles lo extraña que fue la experiencia
pero tuve una sensación de persecución, de ser observada y eso me puso un poco
nerviosa. Solo pude hacer un vídeo más bien regular y decidí que era mejor
descender e ir a buscar lo que había ido a buscar: Atardecer en el Templo IV.
Una vez más terminé uniéndome a un grupo que había escogido hacer el
recorrido durante la tarde, con un muy buen guía también, todos me recibieron
muy bien y continuamos explorando lugares que en la mañana no había tenido
ocasión de observar.Seguimos a un ritmo rápido ya que la meta era estar en la
cima del Templo IV para ver el atardecer. Normalmente a esa hora ya el ascenso
está restringido pero por alguna razón nuestro guía tenía privilegios.
En el Templo IV normalmente se observa el amanecer ya que la única parte disponible para turistas es la delantera, sin embargo nuevamente el guía consiguió que nos dejaran pasar a la parte de atrás en donde observaríamos la puesta del sol. Honestamente no sé cual de las dos vistas es más impresionante. Cuando llegas arriba y ves por primera vez la cima de los palacios emergiendo entre la selva te invade una sensación de asombro,de respeto, te provoca danzar, cantar y arrodillarte para agradecerle a los Mayas y a sus dioses por tanta belleza. Entiendes que en un mundo tan grande caben todas las ideologías y todas las creencias y que podrían estar en armonía, sin anularse entre ellas de no ser por nuestra total falta de tolerancia.
En el Templo IV normalmente se observa el amanecer ya que la única parte disponible para turistas es la delantera, sin embargo nuevamente el guía consiguió que nos dejaran pasar a la parte de atrás en donde observaríamos la puesta del sol. Honestamente no sé cual de las dos vistas es más impresionante. Cuando llegas arriba y ves por primera vez la cima de los palacios emergiendo entre la selva te invade una sensación de asombro,de respeto, te provoca danzar, cantar y arrodillarte para agradecerle a los Mayas y a sus dioses por tanta belleza. Entiendes que en un mundo tan grande caben todas las ideologías y todas las creencias y que podrían estar en armonía, sin anularse entre ellas de no ser por nuestra total falta de tolerancia.
Estuvimos un rato observando el horizonte y creo que todos por primera vez
veíamos una escena muy recordada del cine sin una pantalla de intermediaria.
Ante nuestros ojos nos dejaba perplejos la vista del planeta Yavin 4. Después de
haber pasado tanto tiempo sentada en el Palacio de la Serpiente Bicéfala
entiendo porque George Lucas escogió este sitio para filmar parte de La Guerrade las Galaxias. La vista señores y la 'fuerza de la fuerza' que se siente en
Tikal parecen de otro planeta.
Aun mareados y sin salir del asombro el guía nos informó que debíamos ir
hacia la parte trasera de la pirámide, el espectáculo estaba por empezar. Llegar
al lugar no fue tan sencillo, estábamos a muchos metros de altura y el vértigo
hacía lo pertinente, había que ver bien donde se daba cada paso y asegurar
cuidadosamente un pie antes de mover el otro. Finalmente llegamos justo a
tiempo, como pudimos nos acomodamos en medio de tubos de metal y vigas de madera
y nos dispusimos a ver como el sol se escondía en el horizonte. Pocas cosas en
mi vida me han hecho sentir tanta felicidad.
La foto más bien mala. Pronto les subo el vídeo que quedó mejor. |
El cielo era un círculo cromático cuyos tonos variaban entre rojos y
amarillos, y otra vez la energía me llenaba, sentía como cada una de mis células
se renovaba fue un momento sagrado en el que tuve más de una revelación. Nunca
había tenido una experiencia similar, la persona que se sentó en ese lugar se
quedó allí y quien regresó después de la puesta del sol es alguien completamente
diferente.
El sol se puso y tuvimos que caminar cerca de 30 minutos en medio de la más
espesa oscuridad. No hubo mucho tiempo para despedidas así que con un rápido
'adiós' regresé a mi cabaña dejando para siempre a un grupo de desconocidos que
sin saberlo se quedaron para siempre en la historia de mi vida.
Después de un día tan lleno de emociones me metí en mi cabaña, me di un
baño de agua caliente y me acosté en la hamaca de la terraza a contemplar las
estrellas. No pasó mucho tiempo para encontrarme acompañada de dos muchachos
franceses, una guitarra,unas cervezas y las más deliciosas hamburguesas de
arroz. La noche que pasé en Tikal está en la lista de las 10 mejores de mi vida.
Al día siguiente, muy temprano en la mañana me despedí casi con una oración
del sitio que había cambiado mi vida y con la energía que me quedaba regresé a
Ciudad de Guatemala. Durante el camino tuve múltiples inconvenientes, el bus en
el que viajaba se descompuso así que nuevamente hice amigos en el camino y con
ellos decidimos toma run micro-bus que también se descompuso para finalmente
tomar otro bus que me llevara a la capital. Nada se disfruta más que las
amistades improvisadas, hablamos de Arjona, de Colombia, de Guatemala, ellos
adoraban mi forma de ver su país, sus raíces; yo adoraba hablar con ellos como
si nos conociéramos de toda la vida.
La foto que nunca falta. |
De Guatemala aprendí a agradecerle a Dios por los contratiempos, amigos
los contratiempos son parte del viaje. Aprendí a sonreír en todo momento, a
sentirme en paz conmigo, a amar a los hermanos que te da 'el camino'. Entendí que este es un país "que te enseña a parir pensamientos". Pero sobretodo aprendí a respetar
La Tierra, nuestra tierra y a enamorarme perdidamente de ser latina, de ser americana, de ser indígena. BENDITA SEAS GUATEMALA!
Tan valioso como la tierra que te vio nacer. |
"Me prometí venir por ti, porque quería caminar por las mismas calles que tú pisaste... Y fue así que entendí tu fijación con los adoquines, tu amor por tus raíces, tu respeto por la vida, fue así que entendí a TU PAÍS... Pero también me dí cuenta que Guatemala es mucho mas que tú, tú solo eres parte del maravilloso legado que este país nos ha entregado como continente... Guatemala por si sola encanta. He vivido un par de días en un mundo inmortal de dioses, mayas y sacrificios; de gente buena que comparte, respeta y ayuda. Un día prometí venir por el loco amor que te tengo, pero ahora mi promesa de volver es simplemente por ti Guatemala".
Has estado en un bello paraíso que espero algún momento de mi vida poder conocer. Gracias por mostrarnos una hermosa creación
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