jueves, 15 de agosto de 2013

Más deportes, menos fútbol.

El día de ayer más o menos a esta misma hora me encontraba lamentándome porque el equipo de fútbol colombiano al que apoyo cayó por penales ante uno de sus enemigos naturales. Son cosas del fútbol pensarán ustedes, pues lo que ocurre es precisamente lo contrario porque ayer de fútbol nada. El problema no es la derrota, lo que mortifica al espectador y particularmente a quien les escribe es que los primeros tres cobros desde el punto penal fueron errados, no atajados por el arquero, simplemente desperdiciados con el lujo de quien no tiene nada que ganar o que perder y como si el orgullo de la afición les importara tan poco como esos tiros.

Yo soy una mujer amante de los deportes en general pero consciente de que el único que tiene capacidad de hacernos llorar, reír, blasfemar, abrazar a otros y regocijarnos en 90 minutos es el fútbol. Soy amante (espectadora) de este deporte y por esa misma razón lo respeto y admiro a quienes lo hacen, a quienes nos dan alegrías o tristezas pero que nos recuerdan que somos humanos y tenemos emociones y por esa misma razón rechazo a quienes maltratan a 'la pecosa'  como ayer los jugadores de mi Junior de Barranquilla lo hicieron.

Pero no es del fútbol de lo que quiero hablar, lo anterior simplemente fue un preámbulo que me sirve como ejemplo y fundamento para cierta afirmación que quiero dejar escrita con ustedes de testigo ya que 'verba volant scripta manent' : Desde donde yo lo veo el fútbol no es ni será jamás nuestro deporte nacional, es hora de que el país deje de creer que lo único que es deporte son 11 contra 11 detrás de una pelota. Dicho esto, les comento muchachos que mi tema favorito del día en los #TT que me recomendó mi cuenta de Twitter hoy tiene nombre propio y se llama Caterine Ibargüen.

Antioqueña (lo cual no me sorprende para nada), morena, de 29 años y con un carisma incomparable. Caterine nos ha regalado múltiples alegrías, entre ellas una medalla olímpica en los Juegos que se realizaron en Londres el año pasado y hoy nuevamente hizo ondear nuestra bandera en Moscú en el Campeonato Mundial de Atletismo. Caterine nos ha regalado más alegrías en un año que las que cualquier equipo de fútbol colombiano es capaz de darle a su afición por lo menos en tres. Con su salto triple y con su gracia, con su desparpajo y su empeño por ser cada vez mejor, esta antioqueña ha hecho que al menos una parte del país se siente a ver sus competencias con igual compromiso que ven un partido de La Selección.

Es por eso que si bien ayer me lamentaba, hoy me regocijo, aplaudo y celebro el éxito de una mujer que cada día deja más alto el nombre de Colombia en el atletismo mundial... Caterine gracias por tanta alegría, no creo que exista un sólo colombiano que no se ría cuando tú lo haces.


Por hoy me despido y recuerden: Comentar es agradecer. Si les ha gustado por favor ayúdenme a compartir. Si les interesa seguirme @Pam_Snz en Twitter. Si no les ha gustado esperen la próxima entrada y me comentan.

That's all folks!

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Un saludo especial, Pamela. Ya eres una blogera en toda regla, felicitaciones!

    Hace unos años he seguido la trayectoria de Caterine Ibargüen, desde que la ví por vez primera en los Juegos Panamericanos de Brasil en 2007 (me gusta ver competencias de atletismo) cuando participo en Salto alto.En aquel entonces, tenía otro físico y otro genotipo con más peso corporal. Aunque no era mala en la disciplina que ejercía, tampoco se destacaba, de hecho no paso a las finales en los Panamericanos. Así que fue providencial la decisión que tomó de pasarse a Salto triple y de longitud. Fue en esas modalidades donde pudo demostrar todo su potencial, sino, vean los resultados.

    Por otro lado, y como era de esperarse, ya salió apresurado el Señor Presidente a felicitarla prometiendole apoyo.. No olvidemos que Caterine se formo en esta ultima etapa en Puerto Rico y no en Colombia. Y con ella pasa lo mismo que con otros deportistas colombianos, que triunfan no por el apoyo estatal o porque en nuestro país haya una política de fomento del deporte, sino, por esfuerzo enteramente individual. Esperemos que con el caso citado de Caterine, el del ciclista Nairo Quintana y la bicicrosista Mariana Pajón, el Estado colombiano (porque esto no es solo problema del gobierno) se pellizque e implante una verdadera política de fomento del deporte.

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...